07 febrero 2010

Brazos rotos


Brazos rotos

Como toda historia que se repite, hoy vuelvo a ti, a esta habitación oscura y sin ventanas, a esta habitación que sólo tiene cuatro paredes, una puerta y una cama.

Hoy ha sido otro día más, un día cargado de emociones y de pensamientos llenos de anhelos y de frustraciones… pero eso no importa ya. Hoy regresé, como siempre, para acostarme en esta cama y perderme en recuerdos, pero sobre todo, para dejar que el silencio invada mi mente y me haga pensar menos en lo que esperaba de ti, en lo que siempre he esperado y en lo que algún día espero encontrar…

De ti yo esperaba que me hablaras, yo quería que me vieras a la cara y dejaras escapar una de esas hermosas sonrisas que iluminaban tu rostro, feliz por verme una vez más, por estar allí, contigo. Yo quería que pensaras en mí y te sonrojaras, víctima de tu propia imaginación descontrolada e inocente a la vez, demasiado inocente… Yo quería que tú me abrazaras y, mientras sentía el calor de tus brazos extenderse sobre mi piel, que tú me dijeras que querías hacer todo eso por mí, no importaba si querías hacer mucho más porque eso ya era suficiente para alcanzar mi felicidad.

Quizás… sólo necesitaba que en ese abrazo íntimo, compartido entre tú y yo, me dijeras que querías permanecer así, de esa manera, cada vez que pudieras“siempre” no era una opción. “Siempre” era demasiado, era una falacia que ambos sabíamos era mentira… pero en cambio, “cada vez que pudieras” era simplemente perfecto.

Sin embargo, supongo que todo eso era mucho pedir, pues hoy estoy aquí porque de tu abrazo sólo quedaron tus brazos, ya que el resto de tu cuerpo pareció desaparecer junto con tus palabras, dejándome una vez más en la entrada de esta habitación fría, abandonada y vacía.. a donde sólo vengo a acostarme por un rato nada más, un rato marcado por un tiempo de pasos para nada uniformes.

Hoy me acuesto para dejar que estos brazos, tus brazos, caigan de una vez por su propio peso… solos, y que se unan así a esta colección de brazos caídos que forman la cama donde me encuentro…

Aquí, en esta cama de brazos, brazos fuertes, hermosos, débiles y heridos… todos distintos, todos vivos, todos del ayer… Aquí, yo seguiré recostándome para olvidar, y especialmente, para volverme a convencer de que algún día podré encontrar aquel par que no sólo se atreva a tocarme o a acariciar mi piel, o a sentir el calor de mis labios… yo seguiré esperando encontrar aquel que quiera aferrarse a mí con un abrazo, en vez de dejarse caer tarde o temprano en esta cama, una cama de brazos rotos.

Autor:kuroi

2 Comentarios...:

Carolina dijo...

Me encantó...

:D

los despojos que todavía permanecen después de una ruptura.

The Dreamer dijo...

Decido leer esta historia de nuevo el día de hoy...

Y me gustó mucho mas que la primera vez que la leí :)

Aca en mi cama, espero encontrar quien quiera aferrarse a mí con un abrazo y no quiera dejarse caer... Y si no es en mi cama entonces buscaré aquella donde esperen a alguien que desee que lo abracen fuertemente, yo no lo soltaré :)

Salu2!